Andrei Tarkovski es un director de cine soviético de cuya muerte se cumplen 25 años. Dirigió pocas películas, todas ellas con fama de densas, poéticas y artísticas, de las que la más famosa es posiblemente Solaris, que en su día (1972) se presentó como la respuesta soviética a 2001. Una odisea del espacio. Tarkovski está muy considerado como director de culto gracias también a otras obras como El espejo, Stalker, Nostalgia o Sacrificio, y este libro, titulado Esculpir en el tiempo, recoge sus apuntes sobre el oficio del director de cine a lo largo de su vida.
Un póster de la versión de Tarkovski de la mítica novela de Stanislaw Lem, que incluye además referencia a su paso por el festival de Cannes (vía inventodeldemonio)
En el libro, Tarkovski reivindica el cine como arte autónomo, lujo del tiempo tecnológico que le ha tocado vivir, pero que debe desligarse de las otras artes que lo conforman. Para ello, una película debe definirse alrededor de una figura única, el director, que le da el sentido artístico completo. En coherencia con esta política de autor y la búsqueda de la poética de lo vital que según él debe ser el objetivo del cine, Tarkovski aborrece de los géneros y los efectos especiales, por asfixiar al espectador sin darle tiempo ni espacio para apreciar la poética del cine, y da a éste un sentido moral, con un ansia de expandir el alma de una audiencia limpia, no contaminada de interpretaciones previas y lejos de intereses comerciales y políticos. Tarkovski niega introducir en sus películas elementos simbólicos o interpretables. Dice buscar una emoción poética directa y una representación real del tiempo de la vida en la pantalla, con planos en general muy largos, en los que la cámara fluye de manera muy natural en planos secuencia, en los que se relacionan personas, actos y objetos con un punto de vista emocional. Los críticos que han hecho de él esa figura de culto llenan esto de lecturas que el director niega…
Son míticos los diez primeros minutos del plano secuencia de la última película de Tarkovski, Sacrificio, rodados alrededor de un árbol. Si bien un buen conocedor distinguirá que este fotograma corresponde a la escena final (vía miradasde cine)
Siempre he pensado que no hay que creerse mucho a los artistas cuando hablan de su oficio, y el caso de los directores de cine me parece uno de los más significativos. Varios clásicos como Wilder, Hawks, Welles o Ford parecían tan imbuidos del sentido del espectáculo que se preocupaban más por la brillantez de las entrevistas o los libros en sí que por dar las verdaderas claves del oficio. Tal vez el libro de Truffaut sobre Hitchcock rompe inicialmente esta consideración. Y Esculpir en el tiempo, en realidad, no se parece a ninguno, ya que incluye la experiencia dolorosa de Tarkovski como autor no comprendido, muchas veces por el público, y siempre por la autoridad. Resulta curioso que hable continuamente de que su visión se aleja de la del realismo soviético, al que Tarkovski no considera verdaderamente interesado en dar arte auténtico al pueblo, aunque se cuidara de manifestarlo así (pero en el texto le da buena estopa a Eisenstein, por ejemplo). Si cuando aparecen estas explicaciones sustituimos en el texto pueblo por audiencia y realismo soviético por cine comercial de Hollywood, creo que tampoco cambiaría mucho.
Para leer este libro, les advierto, hay que tener interés por el arte y su relación con la vida, además de por el cine como pasión artística. No es necesario conocer el cine de Tarkovski (yo de hecho sólo he visto tres de sus películas) ni entra en grandes detalles técnicos. Pero, para quien tenga esos intereses, el libro es radicalmente clarividente. Sufre, eso sí, de algo de falta de conexión por ser textos escritos en periodos distintos de la vida del director.
Andrei Tarkovski, vía disparodenieve
Sin leerlo es difícil, pero en principio me produce alergia su argumentación. Defender un único concepto de arte es como defender el pensamiento único. Y el ejemplo del plano secuencia con el árbol no demuestra nada porque en la mirada siempre hay intencionalidad. Nada puede emular la humana libertad de mirar en el sentido que elegimos el plano general o el detalle a nuestro antojo, pretender lo contrario es prepotencia.
ResponderEliminarY no critico su visión, tan válida y artística (o más, no he visto sus películas pero algo me han comentado por aquí) como la de cualquiera. La pasión por la forma de interpretar y expresar el arte no puede ser reduccionista. Va contra su esencia.
Y tampoco puedo estar de acuerdo con lo de “el cine como arte autónomo”. Estamos en plena audiovisualización del mundo y el arte es remezcla. Pretenderse original cuando apoyamos el conocimiento y la creación en todo lo que nos precede es, cuando menos, simplista.
De todas formas me ha creado curiosidad el libro. De momento ya nos ha dado para una mini tertulia por aquí.
Gracias Goio :)
Otro para la pila, y encima el pack con todas sus pelis sigue esperando. Este puente habría sido buen momento para empezar, en lugar del chute de Judd Apatow que me he metido
ResponderEliminarYa se que libro no voy a leer.Gracias por la reseña.
ResponderEliminarSaludos.
básicamente, Isabel, vienes a no estar de acuerdo en nada de lo que dice el señor, ja. Frente a lo que dices, podríamos poner como razones del señor que escribió estos textos entre los 60 y los 80, tal vez con menos visión de las tecnologías mezcladas y globalizadas que tenemos hoy. Posiblemente me he expresado mal con lo de 'arte autónomo', Tarkovski se refiere a que el cine es un arte poco considerado como tal, debido también a su origen harto popular (él dice que a diferenciade otras artes, cosa que yo no comparto del todo), y a la facilidad con que se disgregan sus elementos, que son artes de por sí: la música, la fotografía, la literatura, el teatro. A él le molestaba el escalón de segunda en que solía ponerse al cine. Y yo estoy contigo, esto ha cambiado, pero también entiendo su argumento y en parte lo comparto.
ResponderEliminarpor supuesto que en su mirada sobre la naturalidad también hay intencionalidad, y en algún momento él mismo lo hace implícito en el libro. No es que él no lo sepa o no lo entienda, sino que piensa en los resultados que indica que tiene que tener el arte. No creas, puedes pensar que es reduccionista en lo que propone (pero él se enfrentaba a un reduccionismo mayor, el del poder político que le achuchaba), pero a mí me chocaba mucho lo que sufría por la incomprensión que recibía.
y mil graaacias a ti!
Ha sido un tour completo sobre apatow? Todo lo dirigido, escrito y producido? No te sientes persona de mucho más éxito después de semejante atracón? Por qué has conseguido que hablemos de apatow en un hilo sobre tarkovski? GENIO, eres un GENIO!!
ResponderEliminarPero, hombre, señor juez, que igual hasta puede disfrutarlo para ver lo que no hay que hacer!!
ResponderEliminarPues he de mostrarme de acuerdo con Isabel y Roy Bean, uno mucho más parco que la otra, con otro pequeño matiz respecto a lo del arte autónomo. Interpreto que se puede referir (tú lo sabrás mejor que para eso lo has leído) a que el cine, como arte tiene que compertir, mostrarse autonomo o independiente a los otros. La literatura, por ejemplo, tiene que competir en las descripciones con la fotografía. El cine, así, ha de competir con la pintura, la música... ofreciendo una mezcla que las supere. Es decir, que debe ofrecer un lenguaje propio (de ahí la dificultad de hacer una buena adaptación novela-película), diferente al resto de artes pero sirviéndose de ellas (o no: películas sin música, por ejemplo). En cualquier caso, si da un poco de pereza... me tira más leer Solaris, que está en la lista de espera...
ResponderEliminarUn abrazo!
Solaris, la novela, es excelente, como casi todo lo que leí en su día de Lem, creo que te gustará bastante. La versión de Steven Soderbergh, con George Clooney, también es una peli muy visible. Y sí, lo que comentas viene a ser lo que defiende Tarkovski. Aunque el tío es radical incluso frente a lo que suele decirse, que el montaje es lo que hace diferente al cine al resto de artes, cuando realidad no es cierto: el montaje es aprovechar el material rodado para la narración, y puede llegar a modificarlo. Cambie usted rodado por escrito o grabado y tiene lo mismo en literatura o música. Por eso la visión de este hombre es especialmente peculiar. Aunque, je, parezca que no haya manera de convencer. Si te animas, te recomiendo a ver Sacrificio, que es posiblemente su peli más llevadera a pesar de sus planos eteeeeernos...
ResponderEliminarAnimada tertulia!
ResponderEliminarHe tenido conversación sobre esto en casa con tu tocayo y he leído los comentarios así que ya vemos que el tema se presta. En este momento, también el cine rivaliza con el éxito de las series y yo creo que el arte está (o debe)en todas las manifestaciones del audiovisual.
Estoy viendo The Killing y he escrito sobre ella sin terminarla (cosa poco habitual) porque lo que me ha seducido es el arte visual como narrativa. No sé, si el purismo implica límites a la evolución me da alergia, pero esto debe ser algo personal
Una buena conversación para continuar de pinchos por tu tierra :)
No habría imaginado yo nunca que precisamente Tarkovsky generara la mayor cantidad de comentarios de la historia del blog!
ResponderEliminarClaro que la televisión y sus series, o el videoclip, u otras manifestaciones audiovisuales también son artes. Autónomas? Pues sí, tal vez el concepto esté superado, pero la cuestión es que son capaces por sí solas de tener poder de expresión y emoción. Seguramente mucho de nuestro criterrio sobre ellas tenga que ver con el medio en que se transmiten, y seguramente también necesitarán aguerridos defensores como el bueno de Andrei para fijar ese carácter. Ahora bien, estoy seguro de que mi tokaio no se preocupa en absoluto porque tengan esa etiqueta o no. Y si alguien desprecia una de estas especialidades por no considerarla suficiente de ese carácter, estoy de acuerdo en que ya es ese alguien el que se califica. Igual la cuestión está en el artista, en cómo ve su dignificación frente a las manifestaciones clásicas del arte, porque se quiera o no, esto siempre acaba apareciendo cuando alguien necesita hacerse un nombre no ya por ego, sino para vender y vivir...
Mmmm, yo hubiese jurado que lo del "arte autónomo" habría despertado adhesiones mil entre cinéfilos, por lo que tiene de apreciar la belleza de las imágenes en movimiento más allá de la calidad de la estructura dramática, del contenido, de las convenciones del teatro de la que tantos se han quejado que ha andado el cine preso en más de cien años. En Tarkovski un alga en movimiento es un alga en movimiento y vale tanto y es tan hermosa como lo pueda ser un alga en movimiento.¡No conozco a un director más fácil!
ResponderEliminarSaludos
no se me había ocurrido hasta ahora pero tal vez podríamos decir que Tarkovski pretendía filmar como Pessoa pretendía escribir poesía.
ResponderEliminarqué bien verte por aquí, Sergio!
Te he leído y escuchado siempre, aunque en los últimos tiempos devoro poca o ninguna literatura y los puntos de contacto y posible comentario acaban siendo limitados. Y el blog de viajes me tiene fascinadito, oiga. Ya lo sabe, además.
ResponderEliminarSiempre un placer en cualquier caso!!!
"En Tarkovsky un alga es un alga".Buena sentencia.
ResponderEliminarNo sé, a mi me parece que sus códigos narrativos son complicados, pero te engaña con ese cine contemplativo , con esos monólogos interiores de mas de una hora, sobre la perdida de la espiritualidad, el valor del arte, el temor a la muerte, perdida de valores. Su obra es dura como una ostia en la cara, seca, áspera, sin una mínima concesión al esteticismo, y al entretenimiento ya ni digamos. Es una obra EXIGENTE y eso tiene que saberlo quien se enfrente a su cine, lleno de simbolismos y monólogos interiores. No me gusta su poética ni su mística. Yo , que conste, lo he intentado, Sacrificio (nunca mejor dicho) La infancia de ivan y Solaris. Y gratamente lo dejo para otros, porque simplemente no soy capaz de disfrutarlo, es más he llegado a un punto que me pone de mala ostia (con perdón, que ya van dos veces que lo digo ) hasta mentar su nombre.
Saludos
Roy
Saludos
Roy
Sobre The Killing, Isabel, la he terminado justamente antes de ayer, y bueno, me parece un refrito malo de The Wire: Ciudad portuaria, políticos corruptos, protagonistas desenganchados de la droga y hay hasta polacos!!! y luego un "melo" metido por el medio de una madre absorbida por su trabajo y descuidando la educación de su hijo y su matrimonio, con una acción en algunos capítulos que parece no avanzar. Todo envuelto en elementos telúricos, para darle ese tono grisáceo, que para mi no consigue en ningún momento. La he visto porque me la han recomendado, pero no le doy una nota muy alta, la verdad, me ha decepcionado un poco.Es mi humilde opinión.
ResponderEliminarSaludos
Roy
PD: Goio perdona por ocupar tu sacrosanto espacio con estas cosas pero ha coincidido así.
En Tarkovski la pulpa está riquísima, el problema es que los críticos insisten en atragantarse con las pepitas.
ResponderEliminarEn "Solaris" hay todo lo que quieras sobre divinidad, trascendencia e inteligencias superiores, y hay una historia de amor acerca de un hombre atormentado porque no supo querer a su mujer y ésta acabó suicidándose.
En "Sacrificio" se cuenta la historia de un hombre que puede salvar al mundo de su final si se acuesta con la criada. Vamos, un argumento para Billy Wilder o Preston Sturges.
"Stalker" digan lo digan es un western, es un maldito western, y con algún momento sobrecogedor puro John Ford.
Que no pretendo que al juez le guste, eh?, que no voy a comisión, pero me gusta defender "otro" Tarkovski. Ah, y sí, ya he dicho en Facebook que "Andrei Rublev" no la trago nada bien, que no se diga que soy un fundamentalista, ¡ja!.
Saludos
Pd:Uy, y simbolismos prueba a quitárselos todos...
Puede ocurrir, querido Sergio, que yo me atragante con esas pepitas, no te lo discuto.
ResponderEliminarComo en la pintura, algunos creadores no renuncian para nada a sus prerrogativas, y se vuelven herméticos, pero hablar de apertura puede parecer irrisorio antes estas mazas herméticas, matorrales de espinas, barreras dentadas. El autor si ha entrado ahí, claro, pero no invita a nadie a seguirle salvo dejarse atrapar y seducir, que es lo que debe ocurrir con la cohorte (que admiro) de seguidores que tiene este hombre.Desde luego este cabrón, a mi no me ha dejado entrar.
También puede ser como esos problemas de física rudimentarios, que tan bien conocerá maese goio, en los que lo importante era entender bien el enunciado para luego plantear bien el problema. EL caso es que yo lo dejo para más adelante, tengo mucho, mucho cine por ver, como para seguir perdiendo más tiempo con este hombre al que le he dado varias oportunidades. No penséis que a mi el plano secuencia de Sacrificio cuando llega el cartero y todo eso, no me gusta, pues claro que me gusta, lo que no me gusta es lo que viene después.
Creo que ya he dicho todo lo que tenía que decir, y goio nos va a banear si seguimos así.
Saludos
Roy
PD: Jonathan, te compadezco, amigo, después de tragarte un ciclo Apatow, esperemos que tengas suerte y a ti te de las llaves.
Gracias, Sergio, Tengo olvidadito el blog de viajes, pero pienso retomarlo antes de que acabe el año. ¡Todavía hay viajes! Y sí, me pasa algo similar con muchas cosas de tu blog, que justo no he visto la peli, o hace mucho y no dispongo de la info reciente para comentar, o similar. Yo aún vivo de los estrenos, soy un ser extraño, conectado pero que no usa la web para ver ni descargar, así que mi timing es justo el de los taimados distribuidores o el de las retrospectivas inesperadas... Pero en fin, es la primera vez que contribuyes aquí y lo agradezco sobremanera, que este sitio suele tener una audiencia breve, aunque selecta!
ResponderEliminarGracias juez por sus pertinentes juicios respecto al soviético hermético; descuide, que no me molesta que hable de otras cosas en este foro. Es curioso, tarkovki niega en el libro la mayor, dice que no hay simbolismo en su obra, que las interpretaciones son cosa de críticos cuya mirada ya está influenciada y no es directa como la de un espectador común. Que él no pone símbolos, vaya, que él solo retrata la poética de la vida... En fin, entiendo sus reparos, aunque qué quiere que le diga, la exigencia en sí no ha de ser necesariamente mala. UUd tiene gustos amplios, seguro estoy de que más de un cineasta exigente entra ahí. Bergman puede ser un cineasta exigente. O incluso Fellini, o Ozu, o Bresson, o Dreyer, o Angelopoulos, o Polansky, o Haneke... en fin, que hay muchos con la etiqueta, y se la dejamos. Para mí por ejemplo (lamento poner ejemplos habituales) me resulta de gran exigencia disfrutar de según qué Ford o Kubrick o Wilder, con algunas de cuyas concepciones del cine (o del espectáculo, si prefiere) no coincido ni ética no estéticamente, a pesar de ser tres directores harto reconocidos también por su capacidad de entretenimiento. Con ello quiero decir que el terreno es demasiado subjetivo, como ya usted sabe, qué le voy a decir. Por cierto, que recuperando comentarios de su blog y del del camarada Borg, la fortuna de haber visto casi seguidas Sacrificio y Melancolía deja a esta lastimosamente baja en el escalafón a pesar de varios de sus valores. A mí Melancolía me resultó exigente para soportar ese insufrible cansio y agotado dibujo de personajes femeninos y esa enésima caricatura de vida sociofamiliar en forma de boda que debe ponerles tanto a los nórdicos. La cosa mejora cuando ya definitivamente en vez de intentar hacerlo mejor que vinterberg decide intentarlo con tarkovsky, pero todo me sabía a sucedáneo. Bien que hay narración visual buena y una estética acojonante en según qué pasajes, pero, santo dios, qué puto pesado con sus mujeres independientes por locas o locas por ingenuas, o ingenuas por independientes. Lleva 25 años machacando con el mismo personaje!!
ResponderEliminarNo sé, de lo que digan los directores hay que creerse la mitad. De las biografias leídas, al menos en dos, una de Wilder y otra de Ford, contaban una historia con distinto final.
ResponderEliminarA mi el cine de Tarkovsky, hablando en plata me parece un cine feo, no feista, feo, pero feo, feo.
De Angelopoulos no creo que escuchara salir de mi boca ni "Mu" otro insorportable, que lo aguante Papandreu.
Hombre, no me compare a Fellini, Ozu y todos los que dice, esos de tanto verlos acaban por entrar. Pero con Tarkovsky no me pasa, y juro que lo he intentado, con las tres que cito y en repetidas ocasiones, que le vamos a hacer, a lo mejor en la cincuentena me hago un Tarkovskiano de pro.Pero si hasta Sergio que es capaz de verse un James Benning sin rechistar, dice que se atraganta con la Infancia de ivan u otra por el estilo. Mire, vamos a dejarlo ahí. Por ahora, no tiene solución.
Melancolia para mi está siendo de lo mejor del año, pero claro, yo no tengo el referente de Sacrificio gracias a dios. No siendo Trier un hombre que me tire mucho, nunca me ha tirado, la verdad, después de ver el "árbol de la vida" y siguiendo por la senda apocalíptica, le digo que me ha gustado un poco más, en todo, en su estructura, los 10 frames o cuadros vivientes con que inicia la película que vinculan o nos dan claves para lo que va a pasar a lo largo del metraje, y luego los dos dìpticos sobre cada hermana (si, es cierto que la boda parece un resto de dogma) pero creo que es necesario para mostrar el pre-estado depresivo de la Kristen, ni su padre le hace caso, todo lo que sucede dentro de la casa es ridículo, personajes incluidos.Ahí puedo estar en parte de acuerdo con vd.Pero la segunda parte, ay!, con ese Wagner incluido es un in crescendo hasta el "estallido" final, que me ha tenido con las uñas clavadas al sillón. Y eso que no lo he visto en una gran pantalla que me imagino que debe ser la re-eso.Y bueno lo del las mujeres, toda su carrera ha sido así, yo no lo he tolerado otras veces, pero esta vez me ha entrado por el ojito derecho.
Pero bueno, no me haga mucho caso, que también de lo mejor visto este año ha sido Catfish, estrenada y vista por cuatro gatos, que estamos haciéndole un club hasta con camisetas.
A sus pies.
Roy
Impresionante tertulia! Un placer en estos tiempos que la gente hace RT en twitter sin haber leído siquiera. Se me ha ido de nivel, evidentemente, ya sabe el autor de este blog que me considero afortunada por ser presentada a libros que nunca tendré tiempo de leer (aunque alguno está en mi lista de prioridades). Y tampoco podré hablar de cine en este nivel de erudición, aunque el tokaio del Sr. Borge lleve años educándome con cierto éxito.
ResponderEliminarHa sido un placer seguir la conversación. Lo de “un alga en movimiento es un alga en movimiento” me ha encantado :) Y también he aprovechado para conocer los blogs de los comentaristas, que quedan convenientemente registrados.
Respecto a The Killing, un par de cosas. Por un lado es un post específico para una red social en la que colaboro porque su promotor es amigo, y llevaba yo una temporada muy crítica. Por otro, The Wire es única. De hecho la responsable de que yo me enganchara a las series (“a la carta”, claro). Para mí en The Killing sí hay estilo visual, y me gusta, de hecho en realidad el argumento no me parece tan importante como alguna de las subhistorias que contiene y que enlaza bastante bien (justamente lo de la mala relación de la prota con su hijo me parece la peor). Pero claro, es la opinión de una aprendiz aficionada a esto de la audiovisualización del mundo.
Coincido con la opinión sobre el blog de viajes. Yo también soy adicta. Repito, un auténtico placer esta conversación.
Eh, eh, no marquemos a la gente con reputaciones que no responden a la verdad :-D, que yo siempre he hablado de James Benning con curiosidad y respeto, pero eso no quiere decir que haya visto ni tres minutos de una película suya. Mi tiempo es demasiado limitado como para gastarlo con ese tipo de cine, que por otra parte me suscita enorme curiosidad por su existencia y un profundo respeto. Lo mismo vale para el Kiarostami de "Five" o "Shirin", cinco minutos de "Copia certificada" me interesan y me apasionan más que esas dos películas enteras, sean como sean porque no las he visto enteras. No es mi rollo. Luego puedo entender a las mil maravillas que no se conecte con Tarkovski o Angelopoulos, sin dejar de hablar de ellos enorme pasión. Ah, Angelopoulos, qué ideal siempre para un mes como noviembre...y por cierto con película "insumisa" como "Días del 36", que me recuerda que tengo cierto libro de lectura pendiente y que el festival de cine gay de Barcelona que se celebra ahora ha echado a la calle a una peli de Eva Longoria por llegarles recortada. Por irme distendidamente por las ramas.
ResponderEliminarLo del alga en movimiento es lo que venía a decir Tarkovski en el libro de esta reseña, ni más ni menos.
No, juez, si yo Melancolía la entiendo perfectamente, y sé cuáles son sus opciones visuales, y entiendo el avance inicial (que viene a ser la propuesta visual diferente de esta peli, algo que a von trier siempre le gusta hacer en su melo aunque yo creo que fue más brillante en romper las olas y bailar en la oscuridad y empezó a perder esa frescura en dogville), y el sentido de las naturalezas muertas en la sala de libros, y las fotos de los manzanos y la del slogan. Si lo veo todo claro, pero la 'necesaria' locura de la protagonista no me funciona, por mucho que su depresión sea la melancolía que se llevará la tierra por delante. Me pregunto cuál es el sentido de ese (muy aburrido por otro lado) guiñol social, y me decanto porque von trier piensa que ni la familia ni la sociedad tienen solución, que no reconocen a sus hijos más peculiares y que por ello necesitan un planetazo que te crió. Pero es simplón y psicoanalizador, diría yo. No sé, yo prefiero los antiguos melos de von trier, supongo que porque la redención superaba a la venganza, o porque dejando el melodrama en personal, sin necesidad de acabar con el mundo o diseccionar a los eeuu todo me parecía más controlado.
ResponderEliminarpor otro lado, con más cine a las espaldas que hace quince años, me pregunto cómo vería ahora esas películas. Que dogville imitaba a brecht, que romper las olas imitaba a dreyer, que ahora el señor imita a tarkovsky (que es por cierto la parte de melancolía que te gusta), no deja de ser un punto a estudiar mejor.
Ay, goio, me aburre un poco seguir hablando sobre Melancolía.Y me gusta su lectura, pero ya le he dicho lo que me parece, creo que tiene una parte un poco chabacana,vale, un poquito, de todas formas yo se lo perdono, también creo que todo lo que pasa intramuros, en esa mansión es una porquería, que lo interesante está afuera, y que sí , que por eso creo que ni la familia ni la sociedad tienen arreglo. Será simplón y subrayador psicologicamente, pero a mi me gusta, que le vamos a hacer, ver como Kristen lo somatiza de manera drástica.Como ve no he entrado casi nada en el aspecto visual de la película, con Ofelias llevadas por el agua, o otros momentos de una belleza extraordinaria.
ResponderEliminarDoy por concluido el tema Melancolía. Yo en mi lista la pondré donde se merezca y punto.
Si quiere tener threads de este tamaño ya se está leyendo una biografía del Angelopoulos,que entonces saltarán chispas.
Y por cierto, no es la última película que se nos viene sobre planetas que se acercan peligrosamente a la tierra, todavía nos queda Another Earth: http://www.imdb.com/title/tt1549572/
Abrazos.
Roy
otra tierra se ha estrenado ya, pero en poquitas salas y con promo más bien escasa. No la he visto...
ResponderEliminar"El cine de Theo Angelopulos:imagen y contemplación" de Andrew Horton, en editorial Akal. Juas, juas, juas...
ResponderEliminarSaludos a los dos